jueves, 24 de marzo de 2016

LA DAMA LIBERTAD




El mundo, la vida entera desde el primer hombre.
Teatro, castillo, escenario, plaza, casa, cueva, seres.
Los juglares hacen malabares con unas bolas rojas y celestes, y ella en el trono los mira en su hacer divertir.
Los mira, mientras le sirven miel, las uvas.
Mira a todos alrededor, ¿son como ella o no son?
Mientras, se acomoda los bucles, los retuerce con su mano, los retuerce demasiado, ya no hay bucles, hay pelo suelto mezclado. Los espectadores ahora son verdes en serio y respiran aire, son árboles en la selva, entre las hojas, el pelo se le mete entre las manos. 
Se meten entre adentro. Son raíces, son semillas, se mezclan las especies y nace la variedad.
Se pasa de la actualidad a la Edad de Hierro y a los primeros hombres, somos esos monos que hacen ruido queriéndose decir.
Nos pensamos y nos pensamos.
¿Quién soy?
Calicles o Antifonte. Igualdad o desigualdad por naturaleza.
Pactos, acuerdos, una ficción en la que queremos creer.
¿Es necesaria la Ley?
Ya no somos monos, observa la Dama, entre lo instituido y lo instituyente hay leyes que mueven sus banderas, creamos un orden que siempre excluye y nunca es para todos. Nos acompaña el latido natural que incorpora la imperfección en la belleza.
Somos un pequeño destello de la luz que podemos ser.






miércoles, 24 de febrero de 2016

CORRER



Eran las diez y veintiuno, pero ahora son y veintiséis.
Las ventanas están abiertas porque sigue el verano. Estamos en marzo. Recién empezando. Hay desconcierto, no se sabe si era mejor antes o si después. Lo que se sabe es que así no era. Se huele el cambio. Se siente el frio por las mañanas. Y te das cuenta, el verano pasó. Que todo lo hermoso si quedó en fotos qué alegría y si no se perdió. Quedó tatuado en una piel que pierde su color intenso y que se recupera con tiempo extra al sol.
Don`t worry, be happy.
Cambio, no more.
Pero cambio, hoy, no es una palabra cualquiera, lo era el año pasado, lo era en otro marzo que todavía no es. Y me acordé de esto: uno es el juego entre lo que nunca cambia y lo que cambia constantemente. Ya no soy quien era después de conocerte, me pasa a mí… a todos. Pero cambio no es una palabra cualquiera, se parece a una palabra prohibida, partidaria, que marca una posición. A mí me encantaba el color amarillo. Tengo un vestido que me queda muy bien. Creía que era el color del sol y el sol del despertar, de lo nuevo, bueno o malo, mejor o peor, de lo otro que viene sin tanto o con un poco, no more. 
Decir no more es decir Charly y rock and roll. 
Las palabras son puertas de percepción. 

CONDICIÓN METEREOLÓGICA



 
Hay viento, es de noche, los árboles se mueven y fabrican el sonido lluvia, luces de colores de lado a lado, la mayoría de lo que hay es de madera. Es un bar, la gente está afuera.
Un actor, un director, una organizadora, dos lesbianas y dos que podrían pero no.
Antes de ir al bar fueron al teatro, Roberto Lati leyó algo que las metió en la mordedura de los labios cuando ya llegó a donde te emerge el gesto de morder el labio de abajo, buscando el costado. Ellas se metieron ahí, o se mordieron los labios o son un labio mordido de ahora en más. Son las que podrían ser lesbianas pero no, quizás hayan probado, en verdad se llevan bien, se quieran pero nada más. El amor les mueve algo del pertenecer, y a ellas les mueve la sensualidad, no hay nada que quisieran tener.  Ellas se ven bien juntas, incluso mejor que por separado. Ser dos es cruel y egoísta, ellas convidan algo, pero no se van a dar cuenta tan fácil. 


Cuando salieron del teatro saludaron a Roberto, le vieron la remera de Led Zeppelin y el jean.

Esta es la parte: a los 180 grados se volvió  especial, especial quiere decir cuando serviría para una película.
En el bar, sería por la ropa que tenían, la temperatura, las cervezas, la música, quedarse los tres, estar en un rincón. Empezar a decirse. Seguir una lista que hay que seguir para sentir lo que se siente cuando hay tres y ninguno quiere ser ni uno ni dos ni más. Tres. Triángulo equilátero. Ángulo obtuso y agudo en movimiento.
Lo más lindo del movimiento, la búsqueda por los bordes, el borde siempre sensual, de la textura a la piel.  
Se desprende una sustancia acuosa gelatinosa, y celeste transparente que sostiene y envuelve. El lugar no es así porque no hay un lugar así, pero hay la imagen que representa.

Parece una noche de Enero.
Encontrar forma es parte de la naturaleza, vivirla es la parte que nos toca.
Tupida vegetación húmeda.



 

jueves, 3 de diciembre de 2015

ESTO

                         A vos te gustaba esto.

Y encima llegabas en el momento en que todo estaba tan lindo o
se ponía porque habías llegado.

Tus maneras siempre fueron muchas.

Las palabras más grandes e incompletas definían y
siguen buscando otra forma,  la buscan a medida que
avanzan.

Esto se parecía al concepto deseo.

Esto no es lo que era.

Esto es nuevo.

Una idea se sigue plasmando.




Eso hacemos cuando nos conocemos.

¿Eso hacemos?



 Reconociendo el enigma.

Sentarnos uno delante del otro. Como hablar. Decir.


Si es que seguimos, nos esclarecemos y capaz que después.

Qué lindo.

Esto, ahora.